domingo, marzo 05, 2006

Terapia de choque

Tras todo el rollo que os solté sobre mi fobia al carnaval, hoy estoy aquí tras haberlo sufrido de nuevo en mis carnes. Este fin de semana iba a ser, en un principio, de reclusión total en casita acompañado de un par de películas y un derbi de fútbol. Y por poco lo consigo si no hubiera sido porque Banderas me llamó a eso de las doce de la noche (mejor dicho, me dio un toque y yo le llamé para ver qué le picaba) para ver si salía. No hizo falta que me suplicara mucho, ya que llevaba bastante tiempo sin tomar una cervecita fuera de casa y quería que me contara el viaje que hizo en el puente. Así que decidí enfundarme el disfraz con el voy cualquier día por la calle, el de Ismael de toda la vida, como si no fuera ni sábado ni carnaval. Una camisa paramilitar y una camiseta debajo, por si la calor se hace insoportable, con algún dibujo gracioso me bastan para afrontar la ruta del riguitón iznajeño.

El vivir en la misma calle donde se concentra toda la movida hace que lo primero que te encuentres en cuanto pisas la calle sea un enorme chupa chups, de mil euros por lo menos, que viene de forma implacable hacia ti. Es como si todo el odio de los millones de caramelos con palito que la humanidad ha chupeteado se reflejaran en las intenciones de esa cosa enorme por devolverme el mal que les hemos causado. Al final menos mal que pasó de largo y lo único que pretendía era saludar a alguien se encontraba detrás mía, pero yo estuve a punto de cargarme. A partir de aquí la noche fue normal en unas fechas como estas. Mucha gente disfrazada y para muchos gustos. Desde el típico que decide a última hora cualquier tontería para no salir a la calle como un día normal, pasando por algunos que se habían dejado muchas horas de trabajo y mucho dinero para estar "bonitos" esa noche, hasta el típico disfraz de tía o maricona loca. Y lo de algunos con este último tipo de disfraz llega a ser muy preocupante. Me gustó mucho uno (o una) que iba disfrazado de Balduíno, con una caracterización similar a la película El Reino de los Cielos.

La pregunta típica con autorespuesta se redujo al mínimo, con lo que para mi fue una noche tranquila rodeado de alguna que otra gente extraña (por su forma de vestir). Y habría sido mucho más tranquila si el cielo no hubiera mostrado misericordia. Para un chupa chups de mil euros el peligro que supone salir a la calle bajo un fuerte aguacero como el que se vivió a media tarde puede ser mortal si el envoltorio es un poco defectuoso. De hecho no me volví a encontrar con él por la calle ya que más tarde sí que volvió abrirse el cielo, con lo que yo decidí tirar para casita. Ya que he conseguido superar un poco mis temores, ahora sólo resta por convencer a un par de personas para salir como en La Naranja Mecánica. Es que me da palillo salir por la calle yo solo con los calzoncillos encima de los pantalones y sujetados por unos tirantes.



Y barato que me va a salir el disfraz

2 Comments:

Blogger Mary said...

Hola!

Ants pase e intente dejarte un comentario, y mi navegador no me dejó, por suerte tenias un enlace a firefox y me lo descargue, gracias a ti he descubierto un navegador mas rapido, gracias ^_^

weno! a lo q iba! si te sirve de algo, yo el disfraz ese ya lo tengo, lo malo esq ya se paso el carnaval, pero fue el disfraz q escogi para el mismo, aki lo puedes ver http://www.fotolog.com/black_baccara

Y nada... un saludo y q te vaya bien por esas tierras cordobesas. Un saludo de una chica q vive entre malaga, cordoba y sevilla

auuuuu

10:15 p. m.  
Blogger Ebers Moll said...

Hola mary. Parece que al final el enlace de Firefox ha servido para que alguien descubra los beneficios de ese bicho rojo, jejeje.

Aaaggghhh!!!, me acabas de provocar un ataque de envidia. Que sepas que el año que viene te lo copio. Si yo tuviera que invitar a todo aquel que acertara el disfraz en mi pueblo, creo que al final acabarían por invitarme ellos a mi para que les explicara en qué consiste.

Un saludo

11:02 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home